Hablar de colores es hablar de emociones, de historia, de culturas, de personas y recuerdos. Es hablar de psicología, de lo que nos une y de lo que nos separa.
El punto de partida es lo menos romántico que hay, y es que el color no existe. No por lo menos desde un punto de vista físico. Sólo son ondas de luz de diferentes longitudes (¿he dicho sólo?, pero ¡si esto es una pasada!) a las que nuestros ojos reaccionan creando esa sensación de color en nuestro cerebro. Sea como sea, tú y yo sabemos que los colores son más que ondas de luz, que cada color viene con una mochila llena de significados y emociones.
Y es que en definitiva, experimentamos el color tanto física, como mental y emocionalmente.
En el post anterior te contaba lo importante que es que a la hora de diseñar tu marca visual no pienses en el color o paleta de colores al tuntún, porque tal y como digo siempre el diseño tiene que cumplir una función. Y por supuesto que sí, también hagámoslo bello. ¡Que el sentido y la forma bailen un tango en homenaje a tu marca!
En este post te cuento algunos significados ligados a los colores en nuestra cultura. Es muy importante tener esto en cuenta, si tu marca va a tener presencia internacional es vital investigar qué cargas emocionales o culturales tienen los colores en esos países para no transmitir mensajes no deseados.
Ahora sí, ¡allá vamos!:
Rojo: el color de las pasiones
Está vinculado a conceptos como el fuego y la sangre, dos elementos muy conectados con la vida que hacen que el rojo sea el color de las grandes pasiones (desde el amor al odio), de la vitalidad y de la acción.
Hace siglos los colores de la ropa estaban ligados al estatus social. Los colores luminosos como el rojo estaban reservados para las personas ricas, aunque hoy en día eso ha pasado a la historia todavía vemos su reflejo en las alfombras rojas de los teatros.
El rojo también se ha asociado con lo inmoral (el demonio viste de rojo), con lo prohibido (señales de tráfico) y con el movimiento obrero y la libertad.
Es un color muy dinámico que se ha utilizado muchísimo en la publicidad. Si lo utilizas en tus diseños e ilustraciones ten en cuenta que el rojo es un color cálido que ópticamente parece que avanza por lo que te recomiendo que no lo utilices como color de fondo a no ser que no te importe prescindir de la sensación de profundidad.
Naranja: un color exótico
El naranja es un color un tanto exótico ya que aunque hoy en día la fruta de la que proviene su nombre es muy común en nuestra cesta de la compra, en otros tiempos era una fruta inexistente en Europa.
Es un color muy vinculado a la creatividad, la vitalidad, la energía, la intensidad, la sociabilidad y la actividad.
Entre sus cualidades está la capacidad de unir y armonizar (mucho más que el rojo y el amarillo), podemos ver como Epi – el personaje de Barrio Sésamo – es naranja mientras que el muy habitualmente enfadado Blas es amarillo.
Es un color lleno de sabor ya que muchos alimentos son naranjas.
Amarillo: el color de la luz
Está vinculado a conceptos como el sol, la luz y el oro. El amarillo puro simboliza entendimiento, optimismo, gloria, amabilidad, diversión, juventud, alegría y espontaneidad.
El amarillo es un color que sonríe (como los smiles amarillos) pero cuando el amarillo tiene un pelín de verde en su composición (como el azufre) también tiene asociadas emociones menos populares como los celos, la cobardía y el engaño.
Es más brillante que el blanco y por eso es el color que mejor se percibe desde lejos: las señales de peligro de tráfico tienen el fondo amarillo, el mejor ciclista del Tour de Francia lleva un maillot amarillo y las pelotas de tenis son de este mismo color ya que se ven mejor que las blancas en las retransmisiones televisivas.
Verde: el color de la primavera
El verde es un color agradable para la vista muy conectado con la naturaleza, el medio ambiente y la tranquilidad.
Es el color de la vida y de la salud (los alimentos verdes suelen ser sanos), de la primavera y de todo lo que florece, de los negocios y de la esperanza. Esto último está conectado con la experiencia de que al final (pase lo que pase) siempre llega la primavera con sus flores.
En su polo negativo el verde es el color de lo venenoso y de lo monstruoso (como el demonio que puede ser verde o algunos monstruos).
Es un color muy funcional en nuestra sociedad: podemos verlo tanto en los semáforos cómo en los uniformes de los cirujanos (la función del color en este caso es atenuar la intensidad del color rojo de la sangre (que se vuelve marrón sobre fondo verde).
Azul: el color del mar
El azul es el color más frío y está conectado en nuestro imaginario con el mar y el cielo. En cuanto a su simbolismo evoca emociones y virtudes positivas: conocimiento, tranquilidad, paz, justicia, inteligencia, simpatía, armonía, amistad y fidelidad.
Es el color de la fantasía (el hada madrina de Disney vestía de azul).
Es un color muy popular, tan sólo hay un ámbito donde no es muy conveniente utilizar el color azul y es en los alimentos ya que resultan poco apetitosos al no encontrarse apenas presente en la naturaleza.
Tradicionalmente el azul simbolizaba el principio femenino (y el rojo el masculino).
Violeta: un color lleno de misterio
Es un color muy ambivalente con cualidades opuestas entre sí.
El violeta conecta con la sensualidad, la espiritualidad, el poder, la teología, la singularidad, la extravagancia, vanidad, la inspiración, el sexo (sobre todo acompañado del rojo) y la magia.
Una de las teorías en cuanto a la utilización del color violeta cómo símbolo del feminismo cuenta que Emmeline Pethick-Lawrence (activista británica) popularizó el uso del violeta por parte del movimiento feminista como símbolo de la dignidad de las mujeres luchadoras (ligado al hecho de que en la antigüedad el violeta estaba reservado a las personas que gobernaban debido al precio del tinte). El blanco y el verde eran los otros dos colores que componían el acorde cromático del feminismo simbolizando la honradez y la esperanza respectivamente.
Negro
El negro está muy conectado con la noche y con la muerte.
Evoca conceptos como poder, autoridad, sofisticación, formalidad, seriedad, dignidad, soledad, misterio…
En su polo negativo el negro nos traslada a la negatividad, el miedo, la maldad y el remordimiento.
El negro hace que los demás colores parezcan mas intensos.
Gris
El gris evoca neutralidad, equilibrio (etre el negro y el blanco), seguridad, frialdad, modestia, madurez, e inteligencia.
En cuanto a los conceptos negativos es un color que también puede hablar de falta de compromiso, incertidumbre, vejez, aburrimiento, indecisión y tristeza.
El gris casi nunca evoca emociones muy definidas por lo que apenas se utiliza como el color corporativo principal pero funciona bien para aportar neutralidad dentro de una paleta de colores más rica.
Blanco
El blanco evoca luz, pureza, perfección, matrimonio, limpieza, virtud, inocencia, ligereza, suavidad, sagrado, sencillez, verdad…
El blanco es equilibrio y el buen uso de este color hace que los diseños respiren.
Ahora que ya conoces la mochila emocional que llevan los colores, te habrás dado cuenta de que hay más de una emoción vinculada a cada color. La explicación es que hay más sentimientos que colores, por lo que un mismo color evoca emociones distintas en función del tono, la saturación o los colores que lo acompañen.
A la hora de elegir la paleta cromática para tu marca es muy importante conocer el simbolismo de los colores pero sin perder de vista que hay más factores en juego como el ecosistema de marcas en el que habita (es decir los y las profesionales de tu sector) o en los espacios que habitará (en tiendas, en la calle, folletos, señaléticas…).
* Si te gusta el mundo de los colores y quieres profundizar un poco más aquí van dos libros muy interesantes:
- El color en el diseño gráfico de Sean Adams y Terry Lee Stone
- Psicología del color de Eva Heller